PELÍCULAS FAMILIARES : SPIRIT, INDOMABLE

Casi veinte años después la compañía Universal recupera al personaje equino de   Spirit. El corcel indomable  y reinventa la historia manteniendo, nunca mejor dicho, el espíritu que la anima: el de la libertad y el valor para emprender el propio camino. Detrás de la historia está la canadiense  Elaine Bogan, acostumbrada a dirigir con éxito diversas producciones de animación. Le acompaña en su labor el brasileño  Ennio Torresan, que cuenta con una amplia labor en el departamento artístico de películas como   Kung Fu Panda  o   El bebé jefazo.

Esta vez  Spirit: Indomable  tiene una clara vertiente femenina pues narra la historia de Fortu Prescott, una jovencita vivaracha que regresa a Miradero, el pueblo del oeste de donde salió siendo un bebé. Su padre se sintió entonces incapaz de cuidar de ella tras la muerte accidental de su esposa y dejó que su hermana Cora se la llevara lejos, a la ciudad. Ahora padre e hija vivirán juntos una temporada e intentarán recuperar el terreno perdido. Pero no será fácil, porque desoyendo las órdenes paternas, Fortu se entusiasma con un mustang, un precioso caballo salvaje capturado por unos malvados cuatreros. Niña y caballo acabarán estableciendo fuertes lazos con ayuda de dos jovencitas del lugar, Pru y Abigail.

Estamos ante una bonita película familiar, un western de animación muy femenino, lleno de aventuras y que gustará sobre todo a las más pequeñas de la casa. Probablemente lo más destacado sea el equilibrio que impone el trio de guionistas, en donde se dan cita las cuitas familiares –esa necesidad del padre–, la amistad (aquí queda claro que la unión hace la fuerza), la valentía a la hora de tomar decisiones y numerosos momentos de ternura, música y diversión sin que la historia pierda entidad ni discurra por derroteros sentimentales. Quizá los gags de Abigail con la guitarra sean de lo más destacado, con algún momento muy gracioso (y también tienen su punto las triquiñuelas comerciales de su hermanito), aunque no faltan pasajes más vibrantes, sobre todo en el último tramo.

 

De fondo, por supuesto, reina en   Spirit: Indomable  un canto a la naturaleza, a la vida sencilla y el amor a los animales, servido con dibujos animados de una buena calidad visual, realizados por completo en ordenador a diferencia del film de 2002. Entre los personajes destaca, claramente, Fortu, que en su modo libre y resolutivo al actuar recuerda un poco a la Merida de   Brave. Y merece la pena disfrutar de las canciones –en especial “Fearless” de  Amie Doherty–, donde las letras rebosan de sentido.

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